Niñas
y mujeres
Esta situación también incrementa el riesgo de que sus necesidades no sean tenidas en cuenta en el diseño de políticas públicas dirigidas a promover la igualdad y los derechos de las mujeres, con y sin discapacidad.
La infrarrepresentación de las niñas y mujeres autistas en la investigación ha provocado que la mayor parte del conocimiento disponible sobre el TEA recoja las características y perspectivas de los niños y hombres que lo manifiestan.
Por ello, existe escasa información contrastada sobre la realidad de las niñas y mujeres autistas, lo que provoca que reciban más diagnósticos previos erróneos, dificultando así el acceso a los recursos especializados que precisan.
Soluciones
Para avanzar en el conocimiento sobre la realidad y necesidades de las niñas y mujeres autistas, es preciso:
Incrementar la investigación, incluyendo la perspectiva de género, para conocer las posibles diferencias con los niños / hombres en las manifestaciones nucleares del TEA.
Mejorar las herramientas estandarizadas de detección y diagnóstico clínico del autismo.
Identificar las barreras que experimentan para acceder a los diferentes bienes y servicios en igualdad de condiciones.
Adaptar las políticas públicas y los modelos o intervenciones de apoyo que necesitan para mejorar su calidad de vida.