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“Es fundamental que todos trabajemos en la misma dirección”

  • Hablamos con Rebeca Barrón, presidenta de la Asociación Argadini, con motivo del 15º aniversario de la entidad.
  • "La creatividad es no solo una fuente de inspiración, sino que supone una forma diferente de ver y vivir la vida".
  • "No debería ser preciso incluir a las personas con TEA en nada si previamente se ha logrado que sean personas de pleno derecho”.

Trabajar por la igualdad de derechos y oportunidades personales, educativas, culturales, sociales y laborales de las personas con discapacidad intelectual, personas con trastorno del espectro del autismo, personas con síndrome de Down y personas con necesidades de apoyo y sus familias. Esta es la principal misión de la Asociación Argadini, que este año celebra su 15º aniversario. Por este motivo charlamos con su presidenta, Rebeca Barrón, de cómo ha evolucionado la entidad en estos años, el papel que juegan la creatividad y el arte en todos los servicios que ofrece y la importancia del movimiento asociativo del autismo para promover la mejora de la calidad de vida de las personas con TEA y sus familias, entre otros temas.

ENTREVISTA A REBECA BARRÓN, PRESIDENTA DE LA ASOCIACIÓN ARGADINI

Pregunta (P.) – La Asociación Argadini inició su andadura en 2007 con el objetivo de promover la inclusión social y laboral de las personas con diversidad funcional a través de la expresión artística. ¿Por qué decidieron centrar su actividad en este ámbito? 

 Respuesta (R.) – Yo no diría a través de la expresión artística. Va mucho más allá. El conocimiento es la base de crecimiento de la persona. Las emociones, saber nombrarlas, resultan imprescindibles para conocernos y para socializar con las personas, mientras que la creatividad es no solo una fuente de inspiración, sino que supone una forma diferente de ver y vivir la vida.  

De forma general, la Asociación Argadini tiene como Misión trabajar por la igualdad de derechos y oportunidades personales, educativas, culturales, sociales y laborales de las personas con discapacidad intelectual, personas con trastorno del espectro del autismo, personas con síndrome de Down y personas con necesidades de apoyo y sus familias. 

En la cultura y la creatividad habita todo lo que el hombre necesita. Las artes son el gran libro de la vida, en ellas reside la historia de la humanidad. Presentar a nuestros alumnos tanta riqueza era una obligación y estábamos seguras de que la magia se iba a producir en ese encuentro. 

 P. – ¿Qué balance hace de estos 15 años de trabajo?

R.- Unos años tan apasionantes como duros, de una maestría intensa. Partiendo de que todos estamos preparados para aprender, de que todas las voces tienen cabida, de que cada mirada nos enseña a mejorar la percepción del mundo, el proceso no ha sido nunca fácil, no lo es y con seguridad seguirá presentando dificultades, pero estamos orgullosas de lo conseguido y de nuestra modesta contribución al trabajo con las personas con discapacidad.

 P.- ¿Qué hitos han conseguido y qué retos les quedan por delante? 

R.- El gran hito, dar visibilidad y credibilidad a la persona con TEA y Discapacidad Intelectual. Ellos han demostrado su valía y es preciso reconocer que una vez que se les ha concedido una oportunidad, han sido ellos quienes nos han traído hasta aquí.  Su esfuerzo es el que ha guiado el nuestro. El gran reto es seguir trabajando para ampliar sus horizontes. A pesar del fuerte contenido y significado de la palabra inclusión, ese gran reto supondría eliminarla de nuestro vocabulario cotidiano, pues no debería ser preciso incluirles en nada si previamente se ha logrado que sean personas de pleno derecho. 

P.- El trabajo de su entidad se basa en las líneas del programa ARGADINI de Educación Emocional a Través de la Creatividad. ¿Cuáles son los principios básicos de dicho programa? 

R.-Trabajar para proporcionar un aprendizaje prolongado en el tiempo (la educación o es continua o no es) pensado para y por ellos, pues son quienes mejor detallan qué necesitan para aprender, de modo que concluyan el final de un camino en el que cada uno ocupe su lugar. 

“No debería ser preciso incluir a las personas con TEA en nada si previamente se ha logrado que sean personas de pleno derecho”. 

P.- Argadini cuenta con el apoyo y colaboración de instituciones importantes en el ámbito cultural. ¿Hasta qué punto es importante la implicación de estos colaboradores para el desarrollo de sus programas y talleres?  

R.- Es básica, pero no solo la de los grandes nombres, pues si la sociedad no abre sus puertas de par en par, no se conseguirá nada. Una sociedad que no sueña con todos sus miembros, nunca estará completa y lo que es más importante, no estará preparada. 

Siempre es bueno dar las gracias a todos los museos, instituciones, espacios culturales, bibliotecas, cafés literarios…que nos han dicho: entra, pasa sin llamar. Gracias de todo corazón. 

P.- Las personas con TEA son el colectivo de la discapacidad con la tasa más alta de desempleo. Desde Argadini contribuyen a la inclusión laboral del colectivo con el curso de Técnico profesional en auxiliar cultural. ¿Qué oportunidades profesionales brinda esta formación? 

R.- La formación tiene una duración de uno a tres cursos lectivos en función del grado de especialización que se desee alcanzar. Auxiliar de eventos, congresos e instituciones culturales; Auxiliar de instituciones culturales; Guía cultural y turístico. El alumno obtiene titulación por cada curso superado. El perfil de “Técnico profesional en Auxiliar de cultura” se trata de una propuesta de formación para el empleo dirigida a personas con discapacidad intelectual y Trastorno del espectro autista (TEA), cuya principal finalidad es mejorar la cualificación profesional para el empleo de estas personas, aumentando así sus posibilidades de acceso al mercado de trabajo ordinario. A partir del 2017/2018 Argadini cuenta con el respaldo de la Universidad de Salamanca que reconoce esta formación como titulación propia. 

“Valoro muy positivamente el papel del movimiento asociativo del autismo. Es fundamental que todos trabajemos en la misma dirección”. 

 P.- Además del arte, la literatura juega un papel fundamental en la actividad de Argadini. Junto a los diversos talleres, organizan el Certamen literario Rosetta, que se ha ido consolidando como referencia en este ámbito para las personas con discapacidad intelectual o autismo en España. ¿Qué finalidad persiguen con dicho certamen? 

R.- Dentro de las Escuelas Creativas Argadini, la Escuela Literaria se ha consolidado como referente literario y   el Certamen Literario Rosetta viene a ser la apertura de esa Escuela a terceros mediante sus aportaciones, abordando incluso la apertura a otros países. La palabra es tan poderosa que nos permite conocer mejor a las personas, de ahí la importancia de darles a conocer a través de sus escritos.  

El Certamen Literario Rosetta se ha organizado de manera anual desde 2008 hasta 2020, cuando la pandemia supuso la salida de alguno de los patrocinadores importantes. Durante ese tiempo se publicaron 10 libros de narrativa y poesía, y desde 2018 el libro del ganador del Premio Autor, que en 2018 fue Gretel Hernández Castro por la obra Nueva extracción de la piedra de locura, precisamente cubana, y en 2019 María Gimeno Ruiz por la obra “Epílogo solitario”. 

Esperamos poder recuperar el Certamen y desde aquí hago un llamamiento a empresas para conseguir la financiación que lo permita. 

Y por cierto, una muestra más de su actualidad es que recientemente se ha publicado un disco en el que el grupo From lost to the river, cuya vocalista es nada menos que Mara Dierssen, en el que han musicado varios poemas ganadores del Certamen. Con un resultado espectacular, por cierto. Sería un gran regalo de Navidades.  

P.- Argadini es miembro de la Federación Autismo Madrid y también de la Confederación Autismo España. ¿Cómo valoran desde su entidad el papel del movimiento asociativo del autismo para mejorar la calidad de vida de las personas con TEA y sus familias? 

R.- Muy positivamente, es fundamental que todos trabajemos en la misma dirección.