«Mi presencia en el núcleo familiar es fundamental para el correcto desarrollo de mi hijo»
Luis Vidal es padre de dos hijos, uno de ellos con trastorno del espectro del autismo (TEA). Ha querido compartir su testimonio para Tal como somos, con el fin de visibilizar la dificultad que tiene para conciliar su vida laboral y familiar, ya que él y su mujer trabajan en localidades diferentes. Luis es Policía Nacional y le han denegado la renovación de una comisión de servicios que le permitía cuidar y atender las necesidades de su hijo con autismo.
Como el resto de historias de vida que compartimos en el espacio «Tal como somos», el testimonio de Luis es su opinión personal, por lo que Autismo España no tiene que estar de acuerdo con las afirmaciones vertidas en el mismo.
Testimonio de Luis Vidal
Me llamo Luis Vidal y soy Policía Nacional, al igual que mi mujer. Somos padres de dos hijos, el pequeño de 7 años de edad y diagnosticado de TEA hace ya unos 4 años. Últimamente se nos ha complicado la conciliación de la que tanto se habló hace algún tiempo por parte de la clase política de este país, más de lo que se hace ahora, y que en nuestro caso directamente no existe y me explico…
Todo el que tenga un niñ@ con TEA sabe lo difícil que se hace llevar una vida “normal”. Las obligaciones se multiplican… clases con el logopeda, clases en el centro de autismo, apoyo escolar con el centro especializado, actividades extraescolares para que aprenda a socializarse con el resto de peques… . Si tienes dos hijos la cosa se complica, el trabajo se multiplica por dos. A todo ello súmale tus quehaceres diarios: trabajar, tareas domésticas, ir al taller o al banco, a comprar, al médico… Todo resulta estresante, no hay un segundo de alivio. Si el niño tiene terrores nocturnos e incontinencia urinaria se complica todavía más… No te permite descansar, pero no puedes desfallecer, ¡tienes que seguir adelante por él! Dia a día salimos adelante gracias al apoyo familiar de los abuelos, que son los segundos padres de mis hijos.
Mi centro de trabajo se encuentra en San Sebastián y el de mi mujer en Gijón, pero conseguí que se me concediese una excedencia de la que disfruté 13 meses y que, sin embargo, cuando tenía que renovarla, me la cesaron… empezó entonces mi devenir por tribunales; era injusto que me la quitaran porque nada había cambiado (los motivos por los que se me había concedido seguían permaneciendo, como es obvio y como seguirá sucediendo salvo que algún día llegue una cura para el autismo). Todo en vano, después de mas de un año lucheteando por mi familia, desde el Tribunal Superir de Justicia Asturias me dicen que regrese a mi plantilla y que, si quiero conciliar, me los lleve a ellos para San Sebastián. Vuelvo a recurrir, pero se mantienen firmes en su decisión. Abatimiento total, me siento cansado y derrotado… sin fuerzas para seguir peleando. Sin embargo, y antes de darme por vencido, solicito una excedencia para el cuidado de un familiar al Cuerpo Nacional de Policía, la cual me deniegan porque, para su concesión, el menor debe de tener una enfermedad grave… no entienden que la gravedad no solo viene determinada por el riesgo para la vida, sino por las condiciones difíciles o penosas que el autismo crea para la persona con TEA y sus allegados y la necesidad de atención que genera. No importan los informes de psiquiatras, psicólogos y otros especialistas recomendando que no abandone el núcleo familiar y la importancia que tiene mi presencia para el correcto desarrollo de mi hijo.
Todo el que haya tenido contacto con la realidad TEA es consciente de la dedicación y el nivel de cuidado que estas personas necesitan y que sólo puede proporcionarles alguien con cierta especialización como los padres. Las posibilidades que por razón de mi trabajo me ofrece la LO 9/2015 de Régimen de Personal de la Policía Nacional en lo que se refiere a medidas de conciliación son las siguientes:
1/ Flexibilización horaria de 2 horas (por la discapacidad de mi hijo) … no me vale, no estoy en mi plantilla, estoy a 400km de distancia.
2/ Derecho a ausentarme el tiempo indispensable para poder asistir a reuniones del centro educativo… no me sirve, además el tiempo indispensable es poco, viviendo a 400 km de distancia.
3/ Excedencia por cuidado de familiar/hijo menor de 12 años… en esta solo vale en aquellos casos en que el menor tenga una enfermedad grave (las incluidas en el RD 1148/2011 DE 29 de Julio) y curiosamente no viene recogida ninguna discapacidad. Otro matiz importante es que en caso de concesión y mientras dure la misma no podrás desempeñar actividad retribuida alguna, por lo que si se trata de una familia monoparental olvídate de ella, o comes o cuidas de tu hijo. De cualquier manera, la solicito y como era de esperar me la deniegan, pero no me rindo y consigo un escrito de José Ramón Alonso, catedrático, investigador, exrector de la Universidad de Salamanca y uno de los mayores expertos mundiales en TEA (entre sus numerosas publicaciones, 4 libros así lo atestiguan) para incorporar al recurso. A esta persona no la conocía de nada, pero se interesó por mi caso con el primer email que le escribí. Pero no vale, es investigador, no médico, ya puede saber “latín” y ser una eminencia en el tema, que como no emite informes médicos y no tiene un número de colegiado no le vale al área sanitaria de la División de Personal.
4/ Reducción de jornada… hasta el 50% lo que quieras, pero… no se puede acumular. Para parejas de funcionarios que vivan separados es en la práctica inservible. Cabe la posibilidad de “negociar” con tu jefe su acumulación, pero en caso de conseguirlo, a ver quién es el atrevido que te concede la residencia a 400 km de tu centro de trabajo.
5/ Licencia por Asuntos Propios… te resuelve el problema tres meses (duración máxima) en caso de que se te conceda.
El resto de permisos/licencias/excedencias… no baremas, no computa la antigüedad a efectos de trienios/derechos pasivos, obviamente no cobras… vamos, que no te valen para nada.
La conciliación no existe, ni en la empresa pública ni tampoco en la privada, cada vez estoy más convencido de ello, y las familias cuyos cónyuges trabajan en localidades distintas están totalmente desamparadas.
Fdo. Luis VIDAL SABUGO.