Autismo España persigue diseñar servicios de apoyo para promover el envejecimiento activo del colectivo TEA

Autismo España, muy preocupada por la desatención en la que se encuentra el colectivo, trabaja en el desarrollo de servicios y recursos de apoyo para la mejora de la calidad de vida de éstas personas, en base a los resultados que arrojó el estudio INSETEA (Investigación Social sobre el envejecimiento de las personas con TEA) y que llevó a cabo el pasado año.

Durante este último trimestre de 2017, Autismo España confeccionará un “Manual de actuaciones para promover un envejecimiento activo de las personas con TEA” que recogerá modelos de servicios y apoyos especializados para personas adultas con TEA en proceso de envejecimiento. Además, realizará una colección de guías en materia de salud, seguridad y participación, los tres ejes a partir de los que la Organización Mundial de la Salud define el Envejecimiento activo. Dichas guías incorporarán protocolos específicos de seguimiento, prevención y actuación para garantizar el envejecimiento activo del colectivo.

Este material estará dirigido a los agentes sociales clave con incidencia directa en el colectivo: las propias personas con TEA y sus familias, los/as profesionales de las entidades vinculadas al colectivo, las organizaciones especializadas en mayores y la Administración Pública.  

Envejecimiento de las personas con TEA: dificultades y necesidades

A día de hoy, el envejecimiento de las personas con TEA es una realidad compleja de abordar para las propias personas con TEA, sus familias y las organizaciones especializadas, además de invisible para los principales agentes sociales: existe muy poca información sobre cómo interactúan los procesos de envejecimiento con las características y manifestaciones propias de los TEA; la mayor parte de los apoyos disponibles están dirigidos a edades tempranas o a los primeros años de la juventud; y muchos de los apoyos que reciben las personas adultas proceden de sus familiares (padres y madres especialmente) que, a su vez, experimentan en paralelo sus propios procesos de envejecimiento.

Las principales medidas que se deben adoptar de manera urgente son:

• Es esencial que la confirmación del diagnóstico de TEA se obtenga de manera precoz para garantizar el acceso a los apoyos que la persona precise a lo largo de su ciclo vital.
• Es necesario integrar el conocimiento disponible sobre los TEA con los avances en gerontología y promover la investigación sobre la interacción de los procesos de envejecimiento y las características propias de los TEA. 
• Es importante la sensibilización de la sociedad para crear una imagen social positiva de las personas adultas con TEA.
• Es clave garantizar un desarrollo homogéneo y sostenible de sistemas de apoyo y servicios especializados asegurando la igualdad de oportunidades con independencia del lugar en el que residan y que fomenten su inclusión y participación social.
• Es necesaria promover la formación y capacitación de profesionales así como la consolidación de equipos multidisciplinares estables y especializados en las necesidades de las personas con TEA que envejecen.
• Es urgente promover e impulsar políticas y actuaciones dirigidas a: la salud de las personas con TEA a lo largo de toda su vida, la autonomía personal y la vida independiente, el apoyo a las familias que también envejecen, la protección legal avanzando en la revisión de figuras de protección jurídica existentes en la actualidad (tutela, curatela…) entre otras.