Compartir

«Me alegro de mí mismo por haber seguido adelante en lugar de rendirme»

  • Edith Mateo narra las situaciones que marcaron su vida —el bullying, la pérdida de su madre y el diagnóstico de autismo—, compartiendo un mensaje de fortaleza y apoyo hacia otras personas que están pasando por vivencias parecidas.
dibujo de dos niños señalando a otro que está sentado en el suelo, en actitud burlona

Mi experiencia con el autismo y el bullying

Me presento: soy Edith Mateo Ramos, tengo 24 años y soy de Málaga. Quiero compartir mi experiencia como persona con autismo y contar mi vivencia con el bullying y otras situaciones que marcaron mi vida.

Mis primeros años

De pequeño era todo lo contrario a lo que soy ahora, por así decirlo. Hablaba con normalidad y me relacionaba más o menos bien, pero con el tiempo fui encerrándome más en mí mismo, y eso hizo que empezara a tener dificultades para relacionarme con las personas.

De niño incluso tenía amigos y amigas, salía con ellos y hacía de todo.

Cuando en el colegio empezaron a hacerme bullying, comencé a callarme más, a no tener amistades ni ganas de nada. Pasaba prácticamente las 24 horas del día encerrado y solo salía para ir al colegio Miraflores de los Ángeles. Lo mismo hacía cuando empecé en el instituto Jardines de Puerta Oscura.

Un día me cansé de que la gente se metiera conmigo. En la última clase a la que asistí, los mismos que llevaban metiéndose conmigo desde 2.º de Primaria me miraban mientras se reían. No pude más: cogí mis cosas y salí del aula sin decirle nada a nadie. Desde ese día no volví al instituto.

Básicamente lograron arruinarme los estudios, mi salud mental y mi vida en general, mientras ellos se quedaron tan tranquilos, sin sentir culpa alguna.

Autolesiones, redes sociales y pérdida de apoyo

En aquella época solo pensaba en acabar con mi vida. Me hacía cortes en los brazos porque sentía que eso me hacía estar “mejor”, aunque no era cierto: solo me hacía más daño. Para desahogarme solía escribir frases muy tristes en Instagram sobre cómo me sentía, lo que me pasaba y demás.

Llegué a tener una cuenta con casi 100.000 seguidores, y me encantaba, porque había mucha gente que se identificaba conmigo y con lo que publicaba. Incluso conocí a personas de aquí de Málaga también y de otras partes del mundo. Sin duda, fueron unas de las mejores personas que he conocido en mi vida.

También me pasaban cosas malas en las redes, muchos se metían conmigo por lo que publicaba, me amenazaban, y algunos incluso cogían fotos mías en las que se veían mis cortes para burlarse de mí, publicándolas como si fueran un “meme” o una broma. Todo eso terminó cuando Instagram decidió bloquear mi cuenta por “contenido violento”. Así perdí a casi toda esa gente que me apoyaba y se identificaba conmigo.

La muerte de mi madre y el gran cambio en mi vida

Pasaron varios años y seguía igual de mal mentalmente. El 14 de septiembre de 2024 mi vida cambió por completo: ese día falleció mi madre mientras dormía, y fui yo quien la encontró.

Me acuerdo perfectamente de todo ese momento.

Me quedé sin madre, y además mi padre lleva sin verme desde que era pequeño. Pasa totalmente de mí, y lo único que le importa es intentar vender la casa en la que vivimos mi hermana y yo, que también era de mi madre. Para mí no tengo padre, sobre todo después de saber todo lo que le hizo a mi madre.

Diagnóstico, apoyo y recuperación

A partir de ese momento empecé a ir más al psicólogo. Me diagnosticaron autismo, y comencé a asistir a la Fundación Autismo Sur, donde he conocido a gente maravillosa. Poco a poco estoy mejorando mentalmente gracias a las tertulias de amigos y amigas que hacemos, al apoyo psicológico que recibo en Capacita-le y a todo el entorno que me acompaña.

Siempre me preguntaré cómo habría sido mi vida si esos acosadores no me hubieran hecho bullying. Pero ya no importa. Lo que importa es que sigo aquí, a pesar de todo, y que estoy mejorando en todo lo que puedo. Me alegro de mí mismo por ser tan fuerte mentalmente y por haber seguido adelante en lugar de rendirme.

Mensaje final

Escribo esto para que personas como yo puedan leerlo y sepan que no están solas, que hay más gente como vosotros y vosotras, y que estamos aquí para conoceros, apoyaros y acompañaros en lo que haga falta.

Somos como una familia, y las familias deben estar unidas y apoyarse mutuamente.

 

Edith Mateo Ramos

2025

 

Autismo España no se hace responsable de las opiniones vertidas que se emitan en esta sección puesto que son de carácter personal, y no necesariamente reflejan la posición de Autismo España.