«Autismo Málaga está muy consolidada y toda la provincia está muy volcada con el autismo»
- Hablamos con José Reyes, presidente de Autismo Málaga, con motivo del 30 aniversario de la entidad.
- "Todas las entidades trabajamos para mejorar la calidad de vida de las personas con autismo, aunque cada una tenemos una filosofía para llegar a ese puerto".
- "La unión hace la fuerza y, ante la Administración, el movimiento asociativo es el único interlocutor válido".
La Asociación Autismo Málaga se fundó el 13 de marzo de 1993, por iniciativa de un grupo de padres y madres con hijos e hijas con autismo. A día de hoy, cuenta con más de 240 personas socias, aunque está abierta a todo el colectivo y presta servicio «a cualquier persona autista que lo necesite y llame a nuestra puerta». Así lo asegura su presidente, José Reyes Ortega, con quien charlamos para hacer balance del 30 aniversario de la entidad.
Entrevista a José Reyes Ortega, presidente de la Asociación Autismo Málaga
José Reyes Ortega lleva 38 años vinculado al ámbito del autismo. Son los años que tiene su hijo Daniel, diagnosticado de TEA. En 1993, junto a un pequeño grupo de familias con hijos e hijas con autismo, tomó la decisión de fundar Autismo Málaga, a partir de otra asociación que operaba desde 1979 en la zona de Andalucía Oriental y que había dejado de prestar servicio.
Desde entonces, la entidad ha desarrollado una intensa labor para mejorar la calidad de vida de las personas autistas y sus familias en la provincia de Málaga. Un trabajo que le ha hecho merecedora de reconocimientos como el Premio M de Málaga de la Diputación (2020) o el Premio Plaza de España concedido por la Delegación del Gobierno en Andalucía (2023).
En estos 30 años, Autismo Málaga ha crecido mucho y, a día de hoy, cuenta con un equipo de 120 personas, que prestan servicios especializados a las personas con TEA y sus familias (unidades de días, terapias, ocio, atención temprana, etc.). José Reyes se muestra muy orgulloso del equipo profesional de Autismo Málaga; por ello, asegura que los presidentes de las entidades «tenemos que dar un paso atrás y potenciar a los equipos profesionales, que son los que saben y trabajan a diario con las personas con autismo. Una entidad va a crecer si te rodeas de un buen equipo profesional que preste cada vez mejores servicios».
Los y las profesionales de Autismo Málaga prestan apoyos especializados a las más de 240 personas socias de la entidad aunque, como señala su presidente, están disponibles «para cualquier persona autista que lo necesite y llame a nuestra puerta, independientemente de que pague o no una cuota».
MÁLAGA, UNA PROVINCIA VOLCADA CON EL AUTISMO
En opinión de José Reyes, «el cine y la televisión han servido para dar a conocer las bases del autismo, pero de un autismo distorsionado, porque no se suele visibilizar a las personas con grandes necesidades de apoyo». Por ello, todos los actos públicos que promueven desde Autismo Málaga (conciertos, galas, cenas, etc.) son siempre una oportunidad para divulgar la amplia realidad del autismo y concienciar de que «cada persona en el espectro tiene sus propias demandas y peculiaridades».
En ese sentido, José Reyes sostiene que Autismo Málaga «está muy consolidada y, gracias a su trabajo, toda la provincia está muy volcada con el autismo y conoce lo que es».
MÁS RECURSOS PARA ATENCIÓN TEMPRANA, EDUCACIÓN, EMPLEO Y ENVEJECIMIENTO
«Estamos mejor que cuando empecé, eso sin duda, pero aún nos queda mucho por avanzar. Por ejemplo, hemos avanzado mucho en el diagnóstico precoz y, hoy en día, los diagnósticos se están haciendo relativamente pronto. También hemos avanzado en nomenclatura, en la manera de referirnos a las personas con discapacidad, que ya no son ‘disminuidos’. Pero vamos muy lentos en el desarrollo del trabajo real que hay que tener con las personas con autismo».
Así lo asegura el presidente de Autismo Málaga, que reclama el apoyo y la colaboración de las distintas Administraciones Públicas para que las entidades de autismo puedan seguir desarrollando su trabajo con garantías.
«Todas las entidades trabajamos para mejorar la calidad de vida de las personas con autismo, aunque cada una tenemos una filosofía para llegar a ese puerto«, sostiene. «Al estar todos unidos bajo la Confederación Autismo España podemos hacer más reclamaciones, porque la unión hace la fuerza y, ante la Administración, el movimiento asociativo es el único interlocutor válido».
Aunque las personas con TEA necesitan apoyos a lo largo de todo su ciclo vital, para José Reyes es fundamental potenciar los siguientes ámbitos:
- Atención temprana: «El Estado no puede hacer una inversión económica de 0 a 6 años en atención temprana y, al llegar a esa edad, no seguir prestando los apoyos necesarios a los niños y niñas con autismo», asegura. Llegado ese momento, debería asumirlos el área de Educación, porque a los 6 años comienza la escolarización obligatoria». De no ser así, asegura José Reyes, «las familias con menor poder adquisitivo no pueden asumir los costes de mantener los apoyos que su hijo o hija necesita».
- Educación: «En Andalucía tenemos una serie de aulas específicas para TEA y la figura del asistente en el aula, el denominado ‘proyecto sombra’; la Federación tiene firmado un convenio con Educación en este sentido, pero este recurso debería ponerlo la propia Administración, y no la entidad de autismo«, afirma José Reyes. Porque, al tratarse de personal voluntario, «es muy difícil encontrar a alguien dispuesto a acudir tres o cinco días a la semana, 3 horas diarias, a apoyar a un niño o niña con autismo en su colegio; es insostenible».
- Empleo: «En Autismo Málaga estamos trabajando empleo a través de la Federación Autismo Andalucía, con el apoyo de La Caixa. Cada día vamos un poquito a más, pero es un empleo muy selectivo y muchas veces con apoyo», asegura José Reyes.
- Envejecimiento: El presidente de Autismo Málaga comparte orgulloso que su entidad «fue la primera en tener residencia para personas autistas en Andalucía; actualmente, está completa, con 26 usuarios, y estamos intentando ampliarla con siete usuarios más». En este sentido, sostiene que es necesario «buscar nuevas soluciones de habitabilidad para las personas adultas con autismo, que les permitan vivir dentro de su entorno social, como pretende el Proyecto Rumbo».
MEDIO RURAL Y NUEVAS TECNOLOGÍAS, RETOS DE FUTURO
«Tenemos que adaptarnos a los nuevos tiempos», asegura José Reyes. «Las nuevas tecnologías son una oportunidad, porque abren el camino a la mejora de la verbalización y de las habilidades de comunicación para las personas con autismo», señala.
Además, a través de un programa con la Diputación de Málaga, «estamos trabajando mucho en el medio rural, en pueblos de menos de 5.000 habitantes, donde las personas autistas están más indefensas y tienen menos oportunidades para acceder a los servicios especializados que necesitan. Les prestamos apoyo en sus propios entornos y estamos haciendo un gran trabajo».