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06.06.2019 Accesibilidad

Autismo España se une a Autismo Sevilla en su posicionamiento ante los hechos ocurridos en el centro educativo de Dos Hermanas

Ante los supuestos hechos acontecidos en el Aula Específica de Autismo del CEIP Cervantes de Dos Hermanas, Autismo Sevilla, la Federación Autismo Andalucía y Autismo España, quieren mostrar su preocupación y condenar las supuestas prácticas por parte del profesorado descritas por las familias.

Las grabaciones que han transcendido son de una enorme gravedad, suponiendo un tratamiento vejatorio hacia una menor con trastorno del espectro del autismo (TEA) en el contexto de un centro educativo.  Por medio de gritos, insultos y presiones respondían supuestamente las maestras del aula a la conducta de los alumnos de forma sistemática como se valora en las grabaciones. Estas conductas atentan claramente sobre la dignidad de los menores y suponen un evidente riesgo para su bienestar emocional y para su adecuada participación en el entorno educativo. Son muchas las evidencias acumuladas de que cualquier pauta educativa basada en el castigo no tiene lugar en la educación actual, pero más si cabe en el caso del alumnado con TEA, donde la motivación a través de sus intereses, el refuerzo positivo de lo que hacen bien, la apuesta constante por sus fortalezas y no sus debilidades y el enfoque positivo para los problemas de comportamiento son el único camino para poder conseguir su mayor inclusión y desarrollo académico. La falta de un entorno seguro, estable y provisto de una intervención especializada, específica y profesional a las personas con TEA, presenta una serie de consecuencias importantes para el desarrollo de la misma. Si a esta circunstancia le sumamos una situación de trato inadecuado por las figuras de referencia dentro del centro educativo, la calidad de vida tanto de la persona con TEA como de su familia se ve socavada en gran manera.

La preocupación de las familias por la respuesta educativa en el aula venía de hacía varios meses, lo que les había llevado a elaborar un escrito para el inspector de zona y solicitar una reunión con el Delegado de Educación para la que no habían tenido respuesta.  Llevaban tiempo observando en sus hijos e hijas mayor nerviosismo y ansiedad, y ellas lo relacionaban con los periodos en los que estaban en el aula educativa.  Las dificultades de comunicación y sociales que muestras las personas con TEA, les implica limitaciones a la hora de poder contar las cosas que les pasan, compartir sus emociones e incluso alertar a su familia de posibles situaciones de abuso.  Esto implica una enorme vulnerabilidad ante situaciones de acoso o maltrato que exige a toda la comunidad educativa establecer los mecanismos necesarios para prevenir este tipo de conductas.

La Federación Autismo Andalucía ha solicitado con carácter de urgencia una reunión con la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, en la que abordar esta alarmante situación. Se ha recibido por respuesta la derivación a la Delegación Provincial.

El reto que impone la educación del alumnado con TEA supone a los profesionales una formación especializada que implique la comprensión ajustada de sus necesidades y su forma diferente de comprender el mundo que le rodea, así como las herramientas necesarias para poder mejorar las habilidades en las áreas que les suponen mayores dificultades, como son el área social y comunicativa.  Y todo ello, dentro de un marco ético y de valores ineludible que implica el respeto al alumnado con necesidades educativas especiales, la colaboración cercana con la familia y la respuesta integral por parte de toda la toda la comunidad educativa.

Desde Autismo Sevilla, Autismo Andalucía y Autismo España se solicita a la Delegación Provincial de Educación que actúe de forma urgente y contundente independientemente del proceso judicial que ha comenzado, para esclarecer los hechos como responsable máximo de los docentes y de los centros educativos en la provincia.  Son muchas las familias de alumnos y alumnas con TEA los que esta mañana han amanecido con la incertidumbre de no ser plenamente conocedores de la respuesta educativa que están recibiendo sus hijos e hijas en sus aulas.   Se espera de la Delegación de Educación que pueda tomar la iniciativa en encontrar una respuesta óptima para los alumnos del centro y que tome las medidas razonables con el profesorado implicado.

Pero como representantes del movimiento del autismo en el ámbito provincial, autonómico y estatal, creemos que existen otros elementos preocupantes que van más allá del comportamiento de varias maestras en un centro educativo y que tienen que ver con aspectos que vienen siendo una constante reclamación por parte de nuestra Asociación y Federación a lo largo de los años.  Por un lado, la formación especializada de los profesionales que den apoyo al alumnado con TEA, que sigue sin estar garantizada dentro del sistema educativo.  Por otro lado, el reconocimiento de todas las aulas específicas donde haya preferentemente alumnado con TEA como Aulas Específicas TEA, y que cuenten con la dotación, el reconocimiento, los apoyos y el personal especializado en Autismo.  La inclusión del Aula Específica como un proyecto conjunto de todo el centro educativo, y si no, ¿cómo es posible que estos comportamientos por parte de las maestras no fueran detectados por el resto de compañeros y del equipo directivo del centro?  El acompañamiento, asesoramiento y seguimiento por parte de los Equipos de Orientación Educativa y los Equipos de Orientación Educativa específicos de Autismo, quienes deben hacer el seguimiento de las aulas, los programas de apoyo y la formación de los profesionales de cara a guiar y dar respuesta a los retos que se plantean a lo largo del curso con el alumnado.  Estos equipos están infradotados en la actualidad, para una población escolar con TEA en la provincia que está estimada en más de 2000 alumnos y alumnas. Y también el control y seguimiento por parte de la Inspección educativa del trabajo que se hace en las aulas específicas, especialmente desde el punto de vista de garantizar los derechos básicos y fundamentales. Y si no, ¿cómo puede ser que nadie hubiera detectado todavía en el mes de junio que algo no iba bien en el aula más allá de las familias?

Por tanto, la formación específica y especializada de los profesionales, especialmente de aquellos vinculados directamente a las personas con TEA, la promoción de proyectos de prevención de las situaciones de abuso y acoso en los centros educativos, así como la garantía de la protección del colectivo ante las posibles situaciones de abuso y violencia, son objetivos especialmente relevantes para su desarrollo, bienestar y calidad de vida en los que es especialmente relevante avanzar.

Este caso requiere de una medida ejemplar para las maestras, pero no deja de ser un síntoma de la respuesta global e integral que el sistema ofrece para garantizar una educación de calidad y especializada para el alumnado con TEA. Por ello, desde Autismo Sevilla, la Federación Autismo Andalucía y Autismo España, reiteramos la necesidad de la actuación urgente y conjunta de los organismos competentes, que garantice no solo una respuesta contundente a esta situación, sino también la puesta en marcha de medidas que, en el marco de un desarrollo normativo férreo, proteja la seguridad y la calidad de vida de las personas con TEA.